“A menudo, cuando creíamos que estábamos experimentando con los demás estábamos experimentando con nosotros mismos”.
El retrato de Dorian Gray, O.W
Mesmerizing Visions ~ Ilustración por Claudia Borges. Digitalización & Color por Patricia Urrutia.
El Taita me sonreía. Era verano, no recuerdo que año. Sin instrucción ni advertencia, solo sentí la brusca entrada del rapé, el ardor y ese golpe en todo el cerebro que descoloca del tal manera que hace casi imposible sentir deseos por repetir la experiencia. He nacido varias veces en este mismo tiempo de vida. Creo que no hay muerte. Nacemos todo el tiempo, incluso cuando estamos muriendo estamos naciendo. La presencia y energía carismática del Taita y su mujer invitaban, el halo misterioso intimidaba, el lugar del encuentro tan bi·zarre acentuaba tanto la curiosidad por lo que venía como la urgencia por salir corriendo de esa realidad. Llegó mi turno. Ellos relajados en su estado natural, abiertos, contentos, emanando una energía maternal y clara, intentaron calmar mi llanto ansioso. El sostenía con solemnidad el vaso corto que contenía la medicina. Carlos, el chaman, extendió los brazos, me acerqué, y con cada paso que daba hacia él sentía el abismo, acompañado de la certeza que indica: ya no hay vuelta atrás. Cerré los ojos, bebí y tragué. Morí y allí mismo nací, literal. La ayahuasca es un brebaje medicinal ancestral hecho de la mezcla y cocción de una liana triturada llamada ayahuasca - que actúa directamente en el sistema nervioso central - y las hojas de una planta cuyo compuesto es de principio psicodélico. El resultado es una bebida color musgo, de textura untusoa, sabor a tierra y hojas secas, no recuerdo en este momento su olor. Caminé de la mano de mi inocencia ingenua hacia el lugar en el que pasaría las próximas 8 horas en observación de mis demonios y ángeles internos. Me senté en posición de meditación. Durante los siguientes 30 minutos no percibí ningún cambio. Pasados estos 30 minutos, la llamada “abuelita o yagé” sin piedad comenzó hacer su trabajo conmigo. El primer viaje fue caer caer caer, no había fondo y me despegaba literalmente del cuerpo mientras gritaba “esto cuando va acabar!!”. Apenas comenzaba la noche. De repente boom!. Colores fosforecentes, formas orgánicas moviéndose, música, sonidos, voces, un collage abstracto, un mapa visual que poco a poco he ido descifrando. La toma me sacó del mundo físico hacia el astral. Había comprado un pasaje de muy bajo costo en primera clase hacia las recónditas dimensiones de mi subconsciente, un viaje hacia las estrellas, ultratumbas, la muerte, la ironía, la sexualidad promiscua, el amor incondicional, el nirvana, el samsara, la nada.
Después de esa experiencia no volví a ser la misma, ni ver la vida y la muerte con la misma ingenuidad pero si desde mi inocencia. Quizá esta sea una de las razones por las que hoy pagaría lo que fuera por un viaje real a las estrellas. Mirar el globo desde el espacio es un ejercicio que hago a diario el cual me recuerda mi lugar en este punto azul, en la galaxia, en el universo.
Los procesos no se pueden apresurar. El cuerpo nos habla. El sistema nervioso es el encargado de traducir la información que recibimos.
El cuerpo tiene cuatro centros principales a través de los cuales nos comunica con un lenguaje muy sutil respuestas que aclaran muchas de las preguntas que no se pueden contestar solo desde la razón.
Estas respuestas son tan sencillas como un: SI/YES, un NO, o un NO ESTOY SEGURO/I’M NOT SURE/NO ESTOY LISTO/I’M NOT READY.
Cada uno de estos centros está conectado con un lenguaje que se expresa de manera física, mental y energética. Te sugiero que aprendas alguna técnica o práctica que te lleve a mantener ese lazo atado fuertemente con tu cuerpo. Te invito a serle fiel a este lenguaje que nos señala e ilumina momento a momento el camino.
Que me llevó a “La Toma”? > mucho sufrimiento. Siempre que buscamos un bastón es porque andamos cojos de una pierna. Ser Humano y caos para mi es lo mismo, en diferentes intensidades y niveles. Esta es una razón por la que en algún momento de la escuela llamada vida necesitamos recursos, apoyo, ayuda; lo que considero una decisión sabia siempre que: al lograr integrar eso que ha estado desintegrado se suelte la muleta para seguir moviéndonos hacia delante con la próxima lección. Literalmente decir > next/let’s move on.
Por años, desde la primera invitación que me hicieron, sentí mucha resistencia. La oportunidad para asistir a una ceremonia de Ayahuasca seguía asomándose. Un avión que se detenía ante mi año tras año, en el cual no estaba lista para subir. Mientras que con asombro veía a otros subirse y bajarse yo permanecía sentada en el piso de la sala de espera con una mochila en la espalda cargada de acertijos y sueños no resueltos. Yo colmada de paciencia y curiosidad, con la esperanza de que llegara mi turno para despegar. Siéndoles honesta, nunca busqué conscientemente la toma. Para mi fué como una de esas cosas que llegan a la vida “out of the blue” pero que ciertamente tienen que llegar. Y que ciertamente aunque son inesperadas, una parte oculta que no vemos y se esconde tras todo los que nos envuelve para evitarnos ver más allá de los ojos físicos La ha estado Esperando.
“There's nowhere you can be that isn't where you're meant to be” ― John Lennon
Existe la creencia de que el yagé te llama. Desde la primera vez que me invitaron a una toma hasta el día en que ocurrió pasaron 4 años. Durante ese ciclo de espera sentí mucha resistencia, a la que respeté y honré hasta que el momento perfecto llegó y mi cuerpo lo sintió y así me lo comunicó.
Es importante/esencial agudizar el oido interno. También, educar la mente racional, enseñarla a discernir mas allá del pensamiento lógico.
Cómo podemos mantener la conexión con una inteligencia superior al intelecto?
Cómo podemos despertar esa parte de la materia corporal que está conectada directamente con la Consciencia y que nos ayuda a mirar con plena atención, con una mente abierta y sabiduría interior?
Qué podemos hacer para encontrar nuestro SEXto sentido?
Estas son preguntas que te dejaré abiertas por ahora, las cuales desarrollaré en el news letter de la próxima semana.
El estudio de las sustancias alucinógenas tanto químicas como naturales es cada vez más amplio y profundo. Todavía hay mucho por descubrir e investigar acerca de sus beneficios y secuelas, sin embargo, muchos dejan claro que pueden presentarse trastornos si las ceremonias o prácticas no son acompañadas por expertos en la materia. Yo no poseo estudios formales en ninguna de estas áreas. Mi interés e investigación son personales por lo que la narración que hago está apegada únicamente a la experiencia que como persona he vivido, la cual describo como: maravillosa, impecable y ALUCINANTE!. Puedo celebrar la Ayahuasca con alegría una y otra vez, recordarla con cariño, como uno de esos regalos que la vida tiene escondidos debajo de la manga. Agrego aquí, que así como me atrevo a contar mi vivencia como algo positivo pero que creo no volveré a repetir, se que cientos de humanos a pesar de tener anécdotas muy poco placenteras han recurrido muchas veces más a ingerir los brebajes y/o polvos “mágicos” con la esperanza de aliviar sus aflicciones.
Lo que hoy sirvo en tu bandeja es contenido que me apasiona y me entusiasma compartir contigo. La Ayahuasca es un vehículo sanador ancestral el cual actúa como sustancia psicoactiva “que produce modificaciones de la percepción y la cognición” como asevera el investigador y farmacólogo Jordi Riva. Estas alteraciones abren un portal y la esperanza para millones de personas que han sufrido depresión buscando salir de esa prisión a través adicciones y/o antidepresivos.
No seré nunca esa persona que te anime a ir a una toma de Ayahuasca, le tengo gran respeto pues ella va a ponerte cara a cara con el trauma que estas buscando sanar. Es necesario un gran detonante para que el encuentro entre la purga y la persona ocurra. Quienes se resisten durante la toma viven la experiencia con una intensidad superior. El yagé no es una sustancia que está de boga, no es una droga lúdica, tampoco es un placebo. Es una gran maestra, curandera amorosa; pero cuando “la abuelita aprieta” no hay quien se salve de pasar por ese momento oscuro y fúnebre. Yo siento que para mi fue una bendición. No puedo asegurar que la toma que hice fue debute y despedida, pero si, que a pesar de ver mucho por el portal que se abrió para mi y ver la purga tan intensa y dolorosa de otros, no me quedaron deseos de repetir.
Me asusta pensar que el yagé me vuelva a llamar …
Solo nos queda confiar en que eso que estamos buscando para Despertar de alguna manera también nos está buscando a nosotros. Escuchemos nuestros cuerpos y sigamos nuestro SEXto sentido, confiemos en el poder de la intuición y en la sabiduría ancestral de plantas y prácticas como la Ayahuasca.
con amor,
clau.
pd: me encantaría leer tus comentarios y sugerencias.
Cada viaje es unico e individual,,con mi experiancia por muchos años sigo la vida con agradecimiento y con respeto. Honrando a la pacha, hapus todos los dias de mi vida. Medicinita ayahuasca por ti soy los que soy en mi vida !!!!